Los Llanos del Rabel
Los Llanos del Rabel se sitúan en el Parque Natural de la
Sierra Grazalema, entre el noreste de la provincia de Cádiz y el
noroeste de la provincia de Málaga.
Para hacer este sendero es necesaria autorización y se
ofrecen pocas plazas diarias.
El inicio se encuentra en las proximidades del conocido
como Puerto de los Acebuches, desde el que podremos disfrutar de las vistas del
embalse de Zahara de la Sierra.
Comenzamos el sendero tras cruzar una cancela donde tomamos
la pista forestal que nos dirige sin pérdida a nuestro objetivo. En este
camino podemos observar una de las caleras mejor conservadas de la Sierra, según
describe su panel informativo. Una vez alcanzados los Llanos nos recreamos en
la imagen del pico Torreón (1.648 m), el más alto de la provincia de Cádiz, que
tras las lluvias y bajas temperaturas de los días anteriores estaba cubierto de
nieve, así como toda la cresta conocida como Torreón-San Cristóbal.
Decidimos realizar el Circuito del Pinsapar que discurre por
la parte baja del bosque. El camino comienza con algo de pendiente para luego
bajar nuevamente. Es un trayecto corto de recorrido circular que merece la pena
realizar para contemplar la belleza de esta especie de abetos.
El pinsapo, un árbol de porte elegante y piramidal, que
puede alcanzar más de 20 m de altura, se presenta como reliquia de los bosques
de coníferas terciarios. Se encuentra únicamente en la Sierra de las Nieves,
Sierra del Pinar y Sierra Bermeja.
Para el mediodía estuvimos de regreso en el prado de los
Llanos para disfrutar de la siguiente etapa del día, la gastronómica. Colocamos
las distintas especialidades que cada uno había llevado en el
centro y nos dispusimos a su alrededor para dar buena cuenta de todo, contemplando
unas magníficas vistas. No faltó de nada: el humus de Ramón, que ya se está
convirtiendo en una tradición en nuestras salidas, ensalada de bulgur, empanadas,
tortilla de patatas, salchichas, pechuguitas de pollo, etc. vino tinto, vino
blanco y para rematar la faena, bizcocho y bombones.
Después de un rato de reposo al sol, emprendimos el camino
de regreso para llegar a los coches y visitar Zahara. En el centro del pueblo
tomamos café en el Mesón los Estribos sentados en una mesa junto a sus amplios
ventanales. Ya para cenar nos trasladamos a uno de los bares de la plazoleta de
la Capilla de San Juan de Letrán.
Un día muy completo, donde hubo de todo un poco. Senderismo
y gastronomía en los Llanos. Turisteo y gastronomía en Zahara...¡las tapitas
que no falten!.
Estupenda cronica Raquel,
ResponderEliminarBella fotografía y elegante prosa!
ResponderEliminarEspañoles reunidos.....españoles comiendo. Gastrosenderismo.
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