Visita al Seminario de los Angeles, Hornachuelos.

Este fin de semana hemos combinado el senderismo con el misterio, ya que decidimos visitar el abandonado Seminario de los Angeles, enclavado en el Parque Natural Sierra de Hornachuelos. Una ruta cercana y preciosa, que necesita ,

Para comenzar sin perder la costumbre, algunos, entre los que me incluyo, comenzamos llegando tarde al punto de reunion, aunque en esta ocasion, no fue muy importante puesto que la ruta era cortita y tranquila. Antes de comenzar, hicimos una parada técnica en el Bar El Castillo, de Hornachuelos, donde pudimos tomar un cafelito y unas generosas tostadas, aunque por enfermedad de la cocinera no pudímos degustar sus famosos churros lo dejaremos para la próxima. Ya una vez cargadas las pilas, no dirigimos hacia el embarcadero, y dejamos los coches en un aparcamiento cercano, para tener una salida más facil a la vuelta, y ya con todo los pertrechos listos y los coches aparcados, nos dirigimos al camino que lleva hacia el seminario rumbo a la aventura y al miesterio, ojo no hay que confundir este sendero, con el del Bembezar, ya que para tomar este hay que cruzar la presa pues discurre en la orilla izquierda del pantano. 

Tomamos el camino que discurre a la derecha del pantano y comienza junto a un edificio de servicio de la presa, saludando a los pescadores apostados al inicio, y bordeando el pantano por la senda que se dirige al monasterio, fuismos disfrutando del paisaje tan increible de la zona y también del solecito tan agradable que nos acompañó durante todo el trayecto de ida. Pudimos apreciar varios arroyuelos secos por la falta de lluvia aunque con mucha humedad y musgo, la vegetación se va cerrando conforme avanza el camino pero casi siempre dejando pasar el sol. Tras unos cuarenta minutos de caminata, llegamos a la primera parada, "La fuente",  marcada por un imneso eucalipto, donde degustamos el agua que ofrecia de cada uno de sus tres caños, uno para la salud, otro para la suerte y un tercero para el amor. El camino continua ascenciendo, posteriomente hasta llegar a "La Cruz"con unas vistas impresionates y no aptas para personas con mucho vértigo y desde donde ya se puede apreciar el Seminario de los Angeles en todo su esplendor, rodeado por el verdor de la sierra y observado por los buitres leonados que anidan en su alrededores y acompañados por el agradable canto de los pajaros durante todo el camino.

Una vez frente al famoso y "tenebroso" Seminario, accedimos a su interior para  investigar y contemplar el grado de abandono en el que se encuentra, aunque según comentaron algunos compañeros, parece ser que para su abandono, se encuentra en bastante buen estado. El lugar se encuentra totalmente desolado y saqueado, aunque en algunos puntos guarda cierto encanto y recuerdo de viejas glorias pasadas, por ejemplo con su cocina, imponente a pesar de su abandono, el lugar goza de unas vistas espectaculares al barranco del pantano y transmite mucha paz y tranquilidad, tras vagabundear un poco por su interior, nos quedamos junto a la piscina a disfrutar del sol, contemplar los buitres leonados  y a tomar un tentempie, una vez repuestas las fuerzas, visitamos la gruta del ermitaño, un buen lugar para retirarse a meditar. Posteriormente volvimos sobre nuestros pasos hacia Hornachuelos, antes de que se nos hiciera de noche, comentando lo abandonado e impresionante del lugar y también que a pesar de todo lo que se hablo y se comenta de sus misterios, allí no pasó nada sobrenatural.

 Ya de vuelta nos aventuramos en el bar del Embarcadero, un lugar con unas bonitas vistas al pantano y un personal muy amable, que nos habló acerca de las historias del seminario, de Hornachuelos y de sus famosos buitres. También nos hablaron de unas cuevas que se encuentran bajo el monasterio, semiinundadas por el pantano, que se pueden contemplar desde el sendero del Bembezar o bien en subiendo en barco.

Ya desde allí y para despedir bien el día, nos dirigimos al Bar Canela, junto al cuartel de la Guardia Civil, donde pudimos degustar la especialidad de la zona (venado) y donde pusimos punto final a nuestra salida.




Comentarios

  1. ¡Estupenda narración! Yo añadiría que, por lo escarpado del valle, parecía que estuviéramos en algún paisaje nórdico... Algunos comentábamos que, de haber habido nieve, se habría parecido mucho a los fiordos noruegos. Sin duda, volveremos para hacer el sendero de la orilla opuesta, bastante más largo y que lleva hasta un embalse, aunque no permite acceder al seminario.

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    1. Yo siempre lo he dicho, aquella zona parece totalmente un fiordo.

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  2. Buena crónica si señor. Yo me apunto a la otra ruta que no pasa por el seminario.

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  3. Muy buena descripción de la ruta que compartimos.
    ¡Ay! María...María...El Seminario impone un poco pero de día los fantasmas están durmiendo.

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  4. No decepciona a nadie este sendero. https://rinconesdelvalle.es/hornachuelos/seminario-de-los-angeles/

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